Alemania ha vuelto a prolongar las restricciones por coronavirus, en vigor desde el pasado noviembre, pese a la marcada mejora de los datos epidemiológicos, que han pasado 200 a 80 nuevos contagios por cada 100.000 habitantes en siete días. El objetivo establecido por el Ejecutivo de Angela Merkel en consonancia con la Comisión Europea es de 50 casos por 100.000 habitantes, aunque la canciller considera que lo ideal serían 35 para tener una mayor capacidad de reacción.
El plazo que Merkel y los ministros presientes de los «Länder» se han dado para intentar llegar a esa ratio es ahora el 7 de marzo, aunque condicionado al impacto que las variantes del virus, más infecciosas, puedan tener en el país. Sólo se ha hecho una excepción al cierre decretado para todo el comercio no esencial para las peluquerías, que podrán reabrir con las pertinentes medidas de seguridad, higiene y con cita previa el 1 de marzo. La canciller y los Länder volverán a reunirse el 3 de marzo.